INGREDIENTES
Dos muslos de pollo (O un pollo entero).
Mostaza a la antigua.
Dos dientes de ajo.
Vino blanco.
Aceite de oliva.
Vinagre.
Sal.
Salsa de soja.
Dos patatas.
Champiñones.
Zanahoria.
En un cuenco mezlamos dos cucharadas soperas de mostaza a la antigua, una cucharada (de café) de sal, dos dientes de ajo machacados, una cucharada sopera de vino blanco, una cucharada sopera de aceite de oliva, una de salsa de soja, y una de vinagre. Aunque la mostaza a la antigua ya trae vinagre, me gusta echarle un poco más.
Después de disponer las patatas cortadas en rodajas gruesas, sobre el fondo de una fuente para horno, pintamos el pollo por toda su superficie con la mezcla de condimentos y lo colocamos con la piel para abajo.
Lo metemos al horno a 150 Cº durante 40 minutos. Transcurrido el tiempo lo sacamos y le damos la vuelta, de manera que la piel quede hacia arriba, y lo pintamos otra vez. Otros 40 minutos por este lado, y los últimos cinco a 200 Cº para que se tueste la piel.
Supongo que si no disponeis de tanto tiempo podría cocinarse a más potencia, pero así queda realmente jugoso.
Lo acompañamos de zanahoria cocida y champiñones salteados (La zanahoria la rescaté del caldo para sopa que estaba haciendo con la carcasa del pollo).
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