miércoles, 21 de octubre de 2009

Alitas de pollo con sésamo.

Aquí una tapita del señor Arguiñano.



INGREDIENTES

Alitas de pollo.
Semillas de sésamo.
Huevo batido.
Sal.

La preparación es tan sencilla que casi da vergüenza hacer una entrada sólo para esto.
Colocamos las alitas de pollo en una bandeja para horno, espolvoreamos con sal, y las asamos 30 minutos a 190º o (mejor para mi gusto) 45 minutos a 160º. Al final de la cocción, batimos el huevo con energía, y pintamos las alitas de pollo, que ya han de estar doradas. Espolvoreamos por encima las semillas de sésamo de manera que queden bien pegadas al huevo batido, y volvemos a hornear, esta vez a horno fuerte (220º) durante cinco minutos más.

Espaguettis negros con salmón y nueces

Blanco y negro. Mar y tierra.

Se me ocurrió la receta en uno de los primeros días de frío de este Octubre, ya se han caído las nueces de los árboles y ¡Hay que aprovecharlas! Aunque las de este año han sido especialmente pequeñas.


INGREDIENTES (Para dos personas)

150 g de espaguettis negros más o menos, o dos raciones de la cantidad a la que esteis acostumbrados.
200 ml de nata para cocinar.
100 g de salmón ahumado.
Un diente de ajo.
Un chorro de aceite de oliva.
Una yema de huevo.
50 g. de queso parmesano rallado.
Un puñado de nueces picadas y medias para adornar.

Mientras se cocían los espaguettis (unos 10 minutos en abundante agua salada), he preparado una base de salsa carbonara: He sofrito el ajo bien picado en una cucharada sopera de aceite de oliva. Cuando comenzaron a dorarse añadí la nata y rallé el queso sobre la mezcla. Saqué del fuego y dejé templar.

Cuando los espaguettis estuvieron cocidos y escurridos, añadí una yema de huevo a la mezcla de nata y ajo, ya templada, mezclé, y añadí el salmón ahumado bien picado.

Esparcí por encima de los espaguettis y espolvoreé con nuez picada. ¡Cuidado que no se cuele ninguna cáscara o adiós a los empastes!

jueves, 1 de octubre de 2009

Empanada de atún.



INGREDIENTES Para una empanada pequeña.

Para la masa:
250 g de harina.
100 g de agua.
50 g de aceite de oliva.
Una cucharilla (de las de café) de sal.
15 g de levadura fresca prensada.

Para el relleno:
Dos cebollas.
Un diente de ajo.
Medio pimiento.
Dos zanahorias.
Un chorro de vino blanco.
Una lata grande de atún en conserva.

Formamos un volcán con la harina, en la que habremos mezclado previamente la sal, y en el centro añadimos un poco de agua templada en la que desmenuzaremos la levadura fresca, con un poco de la harina de alrededor. Espolvoreamos con harina por encima y dejamos fermentar media hora.

Mientras tanto podemos hacer el relleno: Picamos todas las verduras en brunoise y las ponemos a sofreír en una sartén con un chorro de aceite de oliva y un pellizco de sal. Es importante pochar bastante las verduras para que la empanada no resulte indigesta, yo las suelo dejar como mínimo media hora, los últimos diez minutos añado un chorro de vino blanco y lo dejo evaporar. Cuando las verduras estén suficientemente cocinadas, se añade el atún desmenuzado y se mezcla bien. Para que la empanada no resulte muy grasienta, podemos poner el relleno en un colador para que rezume todo el aceite sobrante.

Retomamos la masa. Añadimos el aceite de oliva al bol donde está fermentando la masa, y removemos con las manos, y luego amasamos, añadiendo más harina si fuera necesario hasta obtener una bola consistente y elástica. La dejamos levar una hora tapada con un paño limpio.

Cuando haya doblado su volumen, aplastamos para desgasificar, y la dividimos en dos partes, una para la base y otra para la tapa. Extendemos cada una de ellas con el rodillo y recortamos los bordes para hacer dos rectángulos, uno de ellos seis centímetros más largo y ancho que el otro.

Sobre la bandeja del horno engrasada o cubierta con papel sulfurizado, colocamos la parte más grande y cubrimos con el relleno, dejando tres centímetros limpios de masa por todo el perímetro.
Cubrimos con el rectángulo pequeño, y hacemos un "dobladillo" por todo el borde, procurando que quede con buen aspecto. Para sellarlo, utilizamos la punta de la cuchara, clavándola , sin atravesar la masa, formando una especie de puntilla.



Agujereamos con un tenedor la capa superior para que escapen los vapores de la cocción, y decoramos con alguna figura que hayamos hecho con los recortes de masa.

Dejamos reposar un cuarto de hora, pintamos de aceite y horneamos a 200 grados durante 15 minutos o más, dependiendo de lo tostada que nos guste la masa. A mí personalmente me gusta blanquita.

Si preferís una masa brillante, pintadla con yema de huevo batida en vez de aceite.

Huevos souflé con queso.

¡Facilísimos!



INGREDIENTES:

Un huevo por persona
Un pellizco de sal
Una cucharada de queso parmesado rallado por huevo.
Recipientes individuales para horno.


La receta es tan fácil que parece un telegrama:
Separamos las claras de las yemas, reservamos estas últimas (a ser posible en recipientes separados para que no se rompan) y montamos las claras a punto de nieve dura. Añadimos un poco de sal y el queso rallado. Mezclamos sin batir para que no se bajen. Repartimos sobre los recipientes para horno engrasados con mantequilla o margarina. En cada uno de ellos, y con cuidado de no romperlas, depositamos una yema. Al horno precalentado, ocho minutos, a 200 grados. Vigilar que no se quemen por encima y si se doran demasiado poner un trozo de papel de aluminio. Si las yemas nos gustan sólidas, dejaremos los huevos en el horno un total de 15 minutos.